Uso de plásticos agrícolas para mejorar el cultivo de cebollas

Uno de los tesoros agrícolas más apreciados a nivel mundial es el cultivo de cebollas. Se trata de un alimento muy antiguo que no solo posee propiedades alimenticias fundamentales para nuestro desarrollo, sino que además es un elemento imprescindible en nuestra gastronomía. La gran pregunta de los agricultores es cómo mejorar su cultivo y hacerlo más eficiente.

No es un secreto que desde hace varias décadas son cada vez más los productores agrícolas que se inclinan por el uso de películas plásticas con el objetivo de mejorar los procesos de producción que garanticen la obtención de productos óptimos que además se pueden cultivar prácticamente durante todo el año.

Cultivar con la ayuda de mantillos plásticos y sistemas de riego por goteo trae muchos beneficios como, por ejemplo, poder adecuar la temperatura del suelo dependiendo de las necesidades del producto, lograr alimentos más limpios, optimizar la cantidad del agua utilizada y disminución del uso de pesticidas.

En el caso del cultivo de cebollas, la técnica de la plasticultura ha dado excelentes resultados en condados como Crittenden, en Kentucky, Estados Unidos, donde algunos productores han demostrado que valerse de esta técnica les permite obtener cosechas en menor tiempo, mucho más sanas y con productos de más calidad.

Existe un caso muy particular en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, donde es usual que se realice el cultivo de cebollas en zonas donde anteriormente existían pantanos y ahora hay tierra orgánica, aspecto que permite aumentar la productividad. Sin embargo, desde hace varios años se comenzaron a presenciar algunas eventualidades como la muerte prematura de las hojas y los bulbos de cebolla más pequeños, afectando más de la mitad de los cultivos de los productores locales, así como la industria de la cebolla del estado, cuyo valor promedio de cuatro años es de $ 44.7 millones, según datos del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, publicados en el sitio web de la Cornell University.

Por qué pueden verse afectados los cultivos de cebolla

El cultivo de cebollas, así como otros cultivos, está expuesto a padecer enfermedades foliares como el tizón de la hoja de Botrytis, la mancha púrpura y el moho suave, sin embargo, acerca de este caso particular en Nueva York, se determinó que el causante de la afectación es el tizón de la hoja de Stemphylium (SLB), una enfermedad relativamente nueva que está causando estragos, ocasionando que a corto plazo las pérdidas se tornen cada vez más inauditas.

Si bien algunos estudios han determinado que una de las maneras de atacar esta afección es utilizando fungicidas más efectivos, ya que la mayoría de los productores dependen completamente de estas sustancias al momento de tratar esta afección, una alternativa a este tipo de enfermedades podría ser utilizando plásticos agrícolas.

La idea es minimizar el nivel de resistencia que están alcanzando estos patógenos debido a la continua aplicación de fungicidas, lo que a su vez está ocasionando que el cultivo de cebollas presente cada vez más problemas con esta enfermedad foliar dominante, cuya primera aparición en la zona se registró para el año 1985, antes de resurgir en 2011. En este sentido, los productores agrícolas pueden apoyarse en el uso de mantillos plásticos alternativos que les permitan reducir algunas de estas pudriciones bacterianas, por ejemplo, con el uso de plástico negro.

 

 

¿Por qué usar plásticos agrícolas?

Una de las bondades, por ejemplo, del plástico negro, es que logra atrapar los rayos del sol permitiendo que la temperatura del terreno aumente en zonas que son más frías, de esta manera promueve que las cebollas se desarrollen de una manera más rápida y en un entorno más adecuado. Este es el caso del cultivo de melones y muchas otras frutas y vegetales que se ven beneficiadas por el uso de acolchados para su producción.

Teniendo en cuenta esto, los productores agrícolas deben tener especial cuidado con la temporada de siembra en la que se estarían aplicando estos mantillos negros, ya que, de hacerse en meses donde haya más calor natural, propio de la estación de verano, pueden actuar en contra creando el escenario perfecto para el desarrollo de otras enfermedades de pudrición bacteriana. Por este motivo, es mejor aplicarlo en temporadas más frescas para que cumplan su objetivo sin ocasionar daños que lamentar. Otra alternativa podría ser utilizando mantillo plateado metálico reflectante que ayuda a mantener una temperatura, al menos unos 10˚F más fría en el suelo.

Algunos investigadores agrícolas han analizado las ventajas de este mantillo plateado metálico reflectante para disminuir la aparición de trips en el cultivo de cebollas y notaron que de cierta manera es muy efectivo, en comparación con el plástico negro. Más allá de disminuir los trips, el mantillo metálico ayuda a obtener un mayor rendimiento y bulbos de cebollas de mayor tamaño, esto como resultado de las temperaturas más bajas del suelo que influyen positivamente en el cultivo.

Además de los mantillos plásticos, muchos agricultores a nivel mundial se están dedicando al cultivo de cebollas a través de la siembra de variedades más resistentes, valiéndose de la rotación de cultivos y poniendo en marcha buenas prácticas que permitan disminuir la gravedad de estas enfermedades y problemas de insectos, al tiempo que se reduce el uso de herbicidas o pesticidas en aerosoles.

La idea es que, si bien en muchas ocasiones será necesario utilizar sustancias químicas para el control de plagas, esto sea cada vez menos frecuente, apostando por el uso de opciones menos invasivas que permitan asegurar la calidad de los cultivos y la cosecha.

Si se ha optado por la plasticultura, una recomendación es determinar que el suelo elegido para la siembra tenga pocos o nulos antecedentes de malezas difíciles de quitar o plagas que siempre se hagan presentes según la temporada. En este sentido, te invitamos a leer dos de nuestros artículos sobre la importancia de monitorizar los cultivos y sobre manejo de malezas.

Sin embargo, el éxito de cada cultivo de cebollas va a depender en gran medida de la pericia del productor agrícola y de su manera de determinar cuál es la mejor estrategia que le ayudará a potenciar la producción de sus cultivos para satisfacer las necesidades de los consumidores.