Por qué es importante la densidad del heno empaquetado para mejorar la nutrición del ganado

Hablar del mercado agrícola y sus derivados implica una serie de elementos desconocidos por gran parte de los consumidores. La importancia de la alimentación del ganado, sus tratamientos y el cuidado del terreno destinado para el pastoreo, son solo algunos de los tantos aspectos que inciden en la obtención de productos de calidad. En esta oportunidad hablaremos de la importancia de la densidad del heno empaquetado y su influencia en la nutrición del ganado.

Para tener una idea más clara, el heno es el pasto seco, las hierbas y las legumbres secas, que se cortan para utilizarlas como base para el alimento del ganado. Uno de los tipos de heno que se utiliza con mayor frecuencia en la ganadería es la alfalfa cortada y seca, por tratarse de un producto de calidad superior. En épocas de escases el heno es de mucha ayuda para tener reservas disponibles que permiten mantener alimentado al ganado. Cabe destacar que una de las recomendaciones para los agricultores es tratar de aprovechar al máximo las estaciones de mayor crecimiento como, por ejemplo, en primavera, temporada en la que se produce mucho más forraje que en cualquier otra época del año.

Acá entra en juego la henificación, conocida como el proceso que permite conservar forrajes para la nutrición del ganado bovino. Debido al incremento de la población mundial, la producción ganadera se ha visto en la necesidad de mecanizar sus procesos como una manera de generar mayor cantidad de toneladas de alimentos por hectáreas, de allí han surgido parte de las soluciones para el almacenamiento del heno y los espacios necesarios para ello.

El uso de plástico para el almacenamiento de alimentos

Una de las maneras de mejorar la producción de leche es utilizando los métodos adecuados como plásticos agrícolas que permiten almacenar y extender la vida útil de las semillas y alimentos que luego serán consumidos por el ganado. Por lo tanto, los productores deben asegurarse de que los suministros contenidos en los plásticos de ensilaje, donde se destacan las plásticos barrera de oxígeno (OBF) y las bolsas plásticas de ensilaje, estén en óptimas condiciones.

Muchos trabajadores de la industria ganadera están de acuerdo en que es mejor invertir en plásticos de ensilaje de calidad para evitar que los factores ambientales o patógenos como las micotoxinas dañen directamente los alimentos y los animales. Si quieres indagar sobre este tema puedes obtener más información en nuestros artículos Mejores Prácticas para la Producción de Leche y minimizando los Problemas de micotoxinas.

Uno de los aspectos que más preocupa a los agricultores es disponer del espacio necesario para el almacenamiento del heno. Es por ello que siempre están en la búsqueda de nuevas alternativas que les permita ahorrar espacio sin dejar de albergar grandes cantidades de alimento. Una de las técnicas más conocidas es la de enfardar (empaquetar) el heno de forma cilíndrica, ya que esto evita la pérdida de hojas y tallos contribuyendo a un empaquetado de mayor densidad.

Algunos agricultores han experimentado pérdidas durante el almacenamiento del heno, no necesariamente al utilizar grandes pacas, independientemente de su forma, si no al estar expuestas a condiciones inadecuadas de almacenamiento, dejarlas a la intemperie y sin protección que permita su correcta conservación.

En un estudio reciente realizado por la Universidad de Pensilvania, en Estados Unidos, se determinó que para lograr una paca de calidad se debe examinar su densidad, para esto es necesario prestar atención a:

• Madurez del forraje
• Humedad
• Envoltorio oportuno
• Densidad

Según información reflejada en el sitio web de Penn State University, el Baleage o “heno envuelto en húmedo” es simplemente un forraje de un contenido de humedad relativamente alto que se empaca con una empacadora redonda y luego se sella en una bolsa de plástico o se envuelve en plástico, para mantener el oxígeno fuera. Esto les da a los productores la oportunidad de cosechar forrajes de alta calidad a mayores niveles de humedad en comparación con el heno seco.

Heno envuelto en húmedo: ventajas y desafíos

• Asegurar niveles adecuados de humedad. Esto es fundamental para obtener un proceso de fermentación óptimo luego del empacado, asegurando que el oxígeno sea eliminado en su totalidad. Lo ideal es que una paca de heno alcance los niveles de humedad dentro de los parámetros establecidos, entre 45 y 60%.

Una de las alternativas que está ganando popularidad entre los agricultores es utilizar plásticos barrera para mantener el oxígeno al margen y preservar el forraje, sin embargo, es necesario prestar atención, ya que cada vez es más común encontrar películas de plástico en el mercado que afirman pertenecer al tipo de «barrera de oxígeno» cuando en realidad no reducen ni bloquean la transmisión de oxígeno.

Además, uno de los factores considerados en el momento de elegir plásticos para el almacenamiento de alimentos es la inversión que se realizará, y en este punto es esencial estar seguro de que se está adquiriendo lo que se está buscando, porque nadie quiere llevarse a casa el producto incorrecto que al final resulta en una pérdida de capital, tanto por un producto inadecuado como por un aumento en el desperdicio de forraje. Para obtener más información sobre este tema te recomendamos leer nuestro artículo sobre films barreras.

• Cosechar en el momento adecuado. Durante el proceso de maduración de los forrajes, su valor nutritivo va cambiando. En este sentido, es importante tomar en cuenta que el forraje va a depender de su finalidad y de la especie o clase de ganado que se va a alimentar. Si la alimentación de calidad es esencial, el corte debe realizarse durante el período de crecimiento. En cambio, si la prioridad es el rendimiento del forraje, las cosechas deben realizarse de manera tardía.
• Cuidar la temperatura. Parte de los estudios de Penn State University, reflejan que mantener la temperatura interna de la paca en 120º F contribuye a garantizar que la proteína disponible sea la adecuada. Una vez culminado el proceso de empacado, es necesario eliminar lo más pronto posible el oxígeno de la paca, ya que garantiza que la temperatura interna se mantenga por debajo de los 120º F. “El número correcto de capas de plástico (envolturas) también es primordial para mantener la temperatura de la paca lo más baja posible y eliminar el oxígeno rápidamente para iniciar el proceso de fermentación por bacterias anaerobias. Se debe aplicar un mínimo de 6 envolturas (6 capas de plástico de 1 mil) a cada paca, pero se prefieren 8 envolturas”.
• Elaborar pacas más densas y a mayor velocidad. Otro de los datos aportados en el estudio realizado por Penn State University, en el Centro de Investigación Agrícola Russell E. Larson, describe los efectos de la densidad de las pacas, en su calidad y vida útil.

En el análisis se tomaron en cuenta 4 empacadoras diferentes, dispuestas a embalar en tres tipos de velocidad (4, 8, y 12 mph). “Las pacas se envolvieron dentro de las 4 horas posteriores al empacado con un mínimo de 6 mil de envoltura en cada paca, asegurando la eliminación de oxígeno y una temperatura interna por debajo de 120° F. Se insertaron termopares en las pacas 4 horas después del envoltorio para controlar la temperatura interna durante el estudio. Después de 28 días, las pacas se desenvolvieron y se tomaron muestras de forraje de cada una para determinar el valor nutritivo del mismo. Luego se permitió que las pacas se asentaran en el ambiente externo y se monitorizó la temperatura interna hasta que las pacas alcanzaron 2° F más calientes que su temperatura de referencia en el momento del desenvolvimiento, momento en el cual la paca se consideró estropeada y no apta para la nutrición del ganado”.

La densidad de la paca va a depender del tipo de empacadora que se utilice. Por ejemplo, cuando los agricultores utilizan pacas prismáticas o cuadradas, la densidad suele ser más uniforme en todo el volumen de la paca, mientras que en las pacas redondas la densidad es uniforme en todo el volumen de estas, siempre que se utilice una máquina de presión variable. Cabe destacar que la clave aquí es que la zona exterior de la paca tenga presión suficiente para que el agua no penetre en ella. De esta manera, la densidad debería ser, al menos, de 160 kg/m3, este y otros beneficios se obtienen al embalar en pacas redondas. En la actualidad son cada vez más los productores agrícolas que se están inclinando por el uso de este método.

 

Beneficios de la densidad del heno empaquetado

Al tener en cuenta los datos generados luego del uso de las empacadoras a diferentes velocidades, se demostró que la densidad presente en la paca afecta de manera directa su calidad. Esto indica que mientras más densa sea la paca, su pH y azúcar contenida en ella será menor, logrando un proceso de fermentación ideal de los azúcares disponibles en condiciones anaeróbicas. Una vez que los forrajes entran en etapa de fermentación, las bacterias anaerobias se activan para ayudar a convertir los azúcares en ácidos como un producto resultante de la fermentación. La recomendación es que en todo forraje ensilado exista un pH bajo, ya que esto demuestra que ha pasado por un proceso adecuado de fermentación y que el oxígeno encontrado en él ha sido eliminado.

Asimismo, se pudo comprobar que en pacas de mayor densidad se produjo una mayor cantidad de ácidos láctico y acético, que contribuyen a estabilizar los forrajes y servir de indicador para identificar los forrajes de calidad, que tienen un mejor valor de alimentación para la nutrición del ganado. “A medida que aumentaba la densidad de la paca, aumentaban los porcentajes de ácido láctico, ácido acético y ácido total. La vida total de la litera de paca aumenta a medida que aumenta la densidad de la paca. Una paca se considera estropeada cuando alcanza 2º F por encima de la temperatura de referencia de la paca. En el momento del deterioro, ya no es adecuado para el consumo de ganado. Los resultados indican que a medida que aumenta la densidad de la paca, más tiempo puede permanecer el forraje en un alimentador sin estropearse o no ser apto para la nutrición del ganado”.

Gracias a los resultados obtenidos en los estudios llevados a cabo por Penn State University, se determinó que al optimizar las prácticas para la producción de baleage, se puede garantizar un forraje de mayor calidad, siempre que se tengan en cuenta factores como la cosecha en la etapa correcta de madurez, embalaje con la humedad adecuada, rapidez en el envoltorio y el empacado con la configuración de densidad máxima en la empacadora, factor que ayuda a garantizar la fermentación adecuada de la paca, mejorando el valor de alimentación y prolongando la vida de la litera.

Además de estos beneficios inherentes a todo el proceso de empacado, se encuentran otros elementos que influyen de manera directa como, por ejemplo, el ahorro de capital, tiempo, esfuerzo y recursos materiales. A final de año los representantes de Penn State University, reconocen que, si bien se realiza una inversión importante, esta se recupera en otros factores como la obtención de mejores alimentos para el ganado, la disminución en el nivel de micotoxinas en las pacas, mejor aprovechamiento del espacio de almacenamiento, al tiempo que se prologa la vida útil del producto final.

Bale Density Study en la World Dairy Expo

Las personas interesadas en conocer sobre este y otros temas de interés, podrán asistir a la World Dairy Expo que se realizará este año del 1 al 5 de octubre en Madison, Estados Unidos. Específicamente el día miércoles 02 de octubre, habrá una conferencia titulada “Better Haymaking – Greater ROI and Feed Quality for Dairy Operations Through Denser Bales”, un estudio reciente realizado por la Universidad Penn State que confirma que la densidad de la paca redonda conduce a una mejor nutrición del ganado y al retorno de la inversión del productor. El ponente será Curt Hoffman, gerente de marketing de empaque de cultivos de New Holland, y Jordan Milewski, gerente de marketing de preparación de cultivos, quienes compartirán cómo las pacas más densas y otras mejores prácticas de heno y forraje equivalen a una mayor calidad de alimento, ganancias de eficiencia y un mayor ROI en su operación de lácteos.

World Dairy Expo es un evento de cinco días que muestra las nuevas tendencias en el negocio ganadero, así como las más recientes tecnologías disponibles para la industria láctea. Actualmente, es considerada la exposición de ganado lechero más grande e importante de América del Norte, cuya primera edición se celebró en la primera semana de octubre de 1967.