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Son muchas las maneras de comprender todo lo referente al mundo de la agricultura y una de ellas es conociendo parte de los procesos que entran en juego al momento de cultivar. Una de esas alternativas es la agricultura regenerativa, una opción para cultivar el suelo que intenta aprovechar al máximo sus nutrientes. ¿Sabes de qué se trata? en las siguientes líneas hablaremos un poco acerca de esta alternativa para que la conozcas más a fondo.
Es una alternativa agrícola que toma en cuenta una serie de principios y prácticas del mundo agrícola, enfocados en rescatar y tratar de implementar planes que permitan mejorar todo el ecosistema de una granja de cultivos y de pastoreo.
Esta opción no solo busca darle una mayor importancia al cuidado y salud de los suelos que son utilizados para la siembra de alimentos, sino que también resalta la necesidad de mejorar el consumo de agua en la agricultura y de disminuir el uso de fertilizantes y pesticidas que puedan llegar a comprometer la integridad de los terrenos, de los animales y de los alimentos.
Sintetizando, la agricultura regenerativa se enfoca en darle un mejor uso a los recursos empleados en la producción agrícola para aprovecharlos al máximo, de una manera más responsable y evitando que se destruyan o se agoten de manera irreversible.
Una de las grandes preocupaciones, no solo de los productores agrícolas sino de la comunidad en general, es el impacto que puede estar ocasionando la agricultura y el pastoreo en el cambio climático.
Como respuesta surgen esta alternativa para cultivar los suelos haciendo uso de prácticas de la agricultura regenerativa, las cuales podrían contribuir a retener más carbono del que se produce.
Según información reflejada en el sitio web Fast Company, si esta retención sucediera en toda la industria, algunos expertos predicen que el impacto podría ser sustancial. Si la cantidad de carbono en los suelos de las granjas aumenta un 0,4% cada año, según la iniciativa europea «4 por 1000», podría compensar 4.300 millones de toneladas de emisiones de CO2 que los humanos bombean anualmente a la atmósfera. Otros estudios pusieron la cifra en 3 mil millones de toneladas.
Sobre esto es interesante leer cómo los cultivos en Almería, España y el uso de plásticos para invernaderos han ayudado a mejorar la calidad del medio ambiente, ya que consiguen reducir considerablemente la temperatura media anual en -0,25 ºC y reducir el aumento del CO2 debido a la acumulación de carbono en las plantas.
En la actualidad son muchos los productores agrícolas que se están dedicando a implementar estas prácticas de la agricultura regenerativa al encontrar en ella una de las mejores propuestas para ayudar a revertir el cambio climático, ya que paso a paso pueden ir mejorando la calidad del suelo que se ha ido degradando junto con sus componentes orgánicos.
Esto quiere decir que, en cierta medida, se logra eliminar el carbono contenido en los suelos, lo que se traduce en un mejor ciclo y en una mejor calidad del agua utilizada en los cultivos y en las zonas destinadas al pastoreo.
Una de las características que define a la agricultura regenerativa es que es capaz de analizar el manejo de la tierra desde una perspectiva integral para aprovechar, por ejemplo, las bondades de la fotosíntesis en las plantas como una manera de ayudar a cerrar el ciclo del carbono, devolverle la salud al terreno y potenciar la producción de nutrientes del suelo.
Existen algunas técnicas claves que entran en juego cuando se decide implementar la agricultura regenerativa, a continuación, las detallamos:
Cuando se tiene un mayor cuidado con el trato que se le da a los terrenos destinados para el cultivo, se logra incrementar los niveles de materia orgánica del suelo, propiciando la creación de entornos más resistentes y saludables para que los cultivos progresen y mantengan al carbono donde pertenece.
Esto es sumamente beneficioso, sobre todo para los agricultores, ya que con el tiempo van a obtener terrenos cada vez más ricos, densos y con una capacidad de rendimiento mucho mayor, lo que se traduce en un incremento en la producción de sus alimentos.
Se recomienda también implementar cultivos de cobertura en las granjas a fin de evitar que la tierra esté desprotegida, esto permite obtener suelos con mejor materia orgánica donde las enfermedades y problemas de plagas sean cada vez menores.
También existen plásticos de acolchado diseñadas especialmente para cubrir los cultivos y mantener los suelos sanos, que pueden ser de mucho beneficio para la agricultura regenerativa.