Cultivo de piña y cómo el uso de acolchados ayuda en su producción

Es conocido que el uso de plásticos agrícolas ha sido una de las mejores alternativas para el sector, ya que más allá de proteger los cultivos de flores, frutas y hortalizas, tienen la capacidad de potenciarlos, haciéndolos cada vez más rentables, productivos y sostenibles. En la actualidad son muchas las variedades de frutas que se cultivan empleando, por ejemplo, plásticos de acolchado. En esta oportunidad abarcaremos todo lo referente al cultivo de piña y cómo ayuda el uso de acolchado.

En este artículo encontrará:

• Un poco de historia
• El clima y la temperatura en el cultivo de la piña
• ¿Qué ocurre cuando hay sequía?
• Efectos de la humedad y el viento
• Control de las malas hierbas
• Acolchado plástico para el cultivo de la piña
• Resultados de la utilización del acolchado plástico
• Producto recomendado

Si necesita más información o tiene alguna duda relacionada con el uso de plásticos para mejorar sus cultivos de piña, contacte con nuestros expertos.

Un poco de historia

Se tiene entendido que la práctica del cultivo de piña es un asunto milenario, ya que, según información publicada en el sitio web de la Universidad de Florida, los pueblos indígenas de las Américas tropicales y la región del Caribe la cultivaban miles de años antes de la llegada de los exploradores del Nuevo Mundo.

Entre los años de 1500 a 1700, el cultivo se fue extendiendo a otras regiones como África, Asia y Europa y, posteriormente, a principios del siglo XIX, comenzó el comercio de exportación desde las Indias Occidentales, dándole un mayor desarrollo comercial a las regiones del Caribe. Una vez que se potenció el transporte marítimo con refrigeración incluida, el cultivo de piña llegó a Hawái, además de otras partes de Asia y África.

Actualmente la producción de fruta fresca es una industria importante en América Central y del Sur, mientras que la fruta procesada se ve más en Asia. Asimismo, en Hawái, Puerto Rico y Estados Unidos se pueden encontrar importantes industrias que se encargan de la producción de piña, al ser una de las frutas tropicales más importantes del mundo luego de los cítricos, el mango y el plátano.

El clima y la temperatura en el cultivo de piña

Si bien existen numerosas variedades de piña que se pueden encontrar, por ejemplo, en el mercado estadounidense como “Del Monte Gold” ® y “Tropical Gold” ®, unos de los aspectos más relevantes que se deben considerar son la incidencia del clima y la temperatura en el cultivo de piña.

Entre las cualidades propias de las plantas de piña resalta su capacidad para adaptarse bien a las áreas donde generalmente existe un clima cálido o un entorno costero.

En el caso de Estados Unidos, estas plantas de piña se dan muy bien en zonas como Florida donde se cultivan en terrenos y paisajes protegidos. Acá el tiempo que transcurre una vez que se hace la siembra hasta que llega la temporada de cosecha dependerá del tipo de cultivo, las técnicas implementadas y la temperatura, por lo que puede haber una variación entre los 18 y 24 meses.

Con respecto a la temperatura, las plantas de piña no se desarrollan bien a temperaturas bajo cero, simplemente no prosperan, la superficie superior de las hojas se daña, haciendo que desarrollen una apariencia chamuscada y moteada de tono rojizo y blanco, ocasionando que la pulpa de la fruta se pudra.

Mientras que cuando se presentan temperaturas entre los 15.5 °C o por encima de los 32 °C el crecimiento de la planta se puede tornar un poco lento, por lo que es recomendable tratar de garantizar un entorno donde la temperatura esté entre los 20-30 °C para que el crecimiento del cultivo de piña sea óptimo.

Cuando el cultivo está al aire libre, una recomendación es emplear algún material aislante como mantas o mantillo para ofrecer algo de protección a las plantas. Si es el caso y las plantas de piña están sembradas en contenedores, éstas se pueden resguardar en presencia de heladas inesperadas.

¿Qué pasa cuando hay sequía?

Si bien el cultivo de piña se da en climas cálidos y es tolerante al suelo seco, crecen mejor en suelos franco arenosos moderadamente fértiles, por lo que hay que tener especial cuidado para detectar si las condiciones climáticas cambian drásticamente ocasionando sequía y que el suelo se ponga más seco de lo requerido, ya que esto puede hacer que el crecimiento de la planta se reduzca y la producción de frutos disminuya.

La planta no mostrará de inmediato que está sufriendo de sequía, pero se debe prestar atención cuando las hojas más viejas se van marchitando y cuando de verde oscuro las hojas pasan a un tono más pálido, amarillento y rojizo, para luego quedar deformadas.

 

Efectos de la humedad y el viento

En la medida de lo posible se debe evitar que el terreno de cultivo de piña esté excesivamente húmedo o anegado, ya que esto aumenta las probabilidades de que las plantas se pudran y mueran o que la producción y su crecimiento disminuyan considerablemente.

En cuanto al viento, las plantas de piña no requieren tanta atención y se desenvuelven bien en entornos amigables, a menos que se trate de un fenómeno climático especial que atente contra la integridad del cultivo. De producirse un escenario inesperado, es probable que la planta crezca menos y que el tallo de la fruta se desprenda.

Asimismo, puede aparecer oscurecimiento en las puntas y en los bordes de las hojas por vientos muy fuertes (tipo huracán) o porque el viento arrastre rocío salino al estar en zonas costeras.

Control de malas hierbas en cultivo de piña

Además de los factores climáticos que pueden incidir en el cultivo de piña, están las malas hierbas que pueden ser un verdadero dolor de cabeza para los agricultores. Pero ¿por qué pasa esto? Básicamente porque el proceso de crecimiento de las plantas de piña es lento y no permite cubrir rápidamente el terreno, esto hace que las hierbas tengan el escenario y el tiempo perfecto para prosperar.

Las malas hierbas suelen competir con las plantas por la luz solar, el agua y los nutrientes del terreno afectando así su integridad, por lo que es común ver que su rendimiento y crecimiento disminuyan. Para esto es necesario que en las primeras etapas de crecimiento se realicen labores de deshierbe y se utilicen de plásticos acolchado.

Plástico de acolchado para cultivo de piña

Además de ser una de las mejores alternativas para potenciar el cultivo de piña, el plástico de acolchado es de gran ayuda para controlar o eliminar malezas en los terrenos, ya que a la larga son más económicos y convenientes al minimizar la necesidad de realizar operaciones manuales o por medio de herbicidas que mantengan a raya a las malezas.

Todos los terrenos de cultivo son susceptibles a las malas hierbas y malezas, sin embargo, la clave está en el tipo de plástico que se utilice y cómo se aplique en el área, ya que, si se aplica de forma incorrecta, habrá mayor probabilidad de que las malas hierbas y la maleza reaparezcan.

Para esto, cuando se vaya a colocar el plástico hay que procurar, por ejemplo, cubrir muy bien los desagües y pasillos para que la maleza no tenga la oportunidad de establecerse en el suelo que quede expuesto y se tenga que hacer una inversión adicional para aplicar otras operaciones de contención.

Aún existen agricultores renuentes a emplear plástico de acolchado para el cultivo de piña al considerarlo costoso y difícil de recolectar o desechar, ya que hay algunos materiales que no son de fácil biodegradación. Sin embargo, en la actualidad existen diversos tipos de plásticos de acolchado con propiedades biodegradables y que son más amigables con el medio ambiente. Lo cierto es que, desde el punto de vista de las bondades, se trata de una inversión que a largo plazo solo traerá beneficios.

Otra buena opción para proteger al cultivo de las malezas es empleando abono verde y otros desechos orgánicos que funcionen como un mantillo, pero eso también dependerá de los requerimientos del terreno y de lo que desee hacer el productor agrícola. También se puede hacer de forma manual con herramientas como machetes, pero estas prácticas hacen que el suelo quede expuesto, ocasionando su erosión.

Para ampliar y complementar esta información, te recomendamos leer nuestro post sobre Plásticos Totalmente Impermeables Films (TIF) ¿por qué pueden ayudarme en la desinfección de mis cultivos?

Resultado de usar acolchado plástico en el cultivo de piña

Según información reflejada en el portal del Departamento de Horticultura del Gobierno de Nagaland, diversos productores agrícolas han manifestado que gracias al haber dado el paso de implementar plásticos de acolchado en sus cultivos de piña estos se han potenciado enormemente.

Tal es el caso de Letthang Misao, un productor de piña de Molvom Village, en la India, que señala que después de haber cultivado piña usando mantillo de plástico estabilizado con rayos UV de 50 micrones, en una hectárea de su granja, su producción tuvo una mejora significativa.

“Hubo uniformidad en el tamaño de los frutos con un peso promedio superior a 1,5 kilogramos, también hubo alguna mejora en el valor T.S.S, incluso en la cosecha de invierno. Aunque su coste inicial fue mayor, el gasto en la temporada posterior se redujo diez veces. También acortó el período de iniciación de la flor de 15 meses a 10 meses”.

Los acolchados en la actualidad

Los plásticos de acolchado son cada vez más fáciles de manejar, transportar y colocar, convirtiéndose así en el material preferido para usar como mantillo en el cultivo de piña, ya que impactan directamente en el microclima alrededor de la planta, modificando el balance de radiación de la superficie, disminuyendo la pérdida de agua del suelo y controlando las malas hierbas y malezas.

Son diversos los colores (negro, transparente o claro, blanco, plateado, azul, rojo, verde, amarillo, etc.) y espesores en los que se pueden encontrar los acolchados plásticos, todo dependerá de la necesidad el cultivo. Lo ideal es que el elegido cuente con las ventajas específicas y que tenga cualidades beneficiosas para el cultivo de piña en particular.

Si bien se han utilizado materiales de LDPE, HDPE y PVC flexible para el acolchado, actualmente la gran mayoría de los acolchados plásticos se basan en LLDPE porque su uso resulta ser más económico que otras alternativas, además porque tiene excelentes propiedades de reducción de espesor, mejor resistencia a la perforación y la opacidad permiten controlar mejor el crecimiento de malezas debajo de la película.

Juan García, Gerente de Producto del área de Cubiertas de Invernadero en el Grupo Armando Álvarez, destaca que más allá de contar con plásticos de acolchado que hagan su trabajo en los terrenos de cultivo, uno de los aspectos más importantes es que se busquen fabricantes de acolchados que trabajen con tecnología de punta para facilitar el trabajo.

“Uno de los principales objetivos de la tecnología debe ser facilitar el trabajo del ser humano. Por eso, cuando la tecnología permite la fabricación de materiales para acolchado de anchos superiores a los habituales (17.5 metros) y bajos espesores, el tiempo de las tareas de instalación puede llegar a reducirse a la mitad. Eso se traduce en beneficio para el empresario y para el operario”, según García.

Producto recomendado:

• Sotrafilm NG